Natación para adultos

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No importa si eres una persona poco que practica poca actividad física o si amas el deporte. La natación se puede adaptar a tus necesidades y a tu horario. Solo necesitas una piscina y mucha motivación.

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    ¿Qué es la natación para adultos?

    La natación para adultos es la práctica de la natación para las personas de entre 19 y 65 años. En este rango de edad el cuerpo humano ha terminado de crecer y es cuando más destacan las personas en este deporte. Los nadadores profesionales que consiguen las mejores marcas y batir los récords mundiales suelen tener entre 22 y 25 años de edad para los hombres, y entre 18 y 22 años para las mujeres.

    No importa si aún no te has atrevido a lanzarte al agua, ahora te enseñaremos a como aprender a nadar siendo adulto.

    ¿Cómo aprender a nadar desde zero?

    Como ya te hemos dicho, nunca es demasiado tarde para aprender a nadar. Aquí te dejaremos algunos consejos y recomendaciones para aprender a nadar de forma correcta siendo adulto.

    Comienza en la parte poco profunda de la piscina

    Es normal tener miedo al agua si has pasado poco tiempo en ella. Una forma de superar ese miedo es comenzar en el extremo poco profundo de la piscina. Allí, podrás ponerte de pie en el agua, y aumentar la profundidad según lo cómodo que te vayas sintiendo. Practica contener la respiración bajo el agua, sabiendo que puedes tomar aire cuando lo necesites. Esto te dará más confianza en los primeros pasos.

    Compra gafas de natación

    Encontrarás que es mucho más fácil ver bajo el agua si usas gafas. Además, las gafas hacen que la natación sea más cómoda, ya que evitan que el agua entre en los ojos. Poder ver claramente mientras tu cabeza está debajo de la superficie hará que aprender a nadar sea más agradable.

    Pasa mucho tiempo en el agua

    Ganar confianza y convertirse en un un buen nadador requiere que pases suficiente tiempo en el agua. Cuanto más tiempo pases, más cómodo te sentirás y mejor nadador serás.

    Siendo adulto es difícil tener tiempo para ir de forma regular a la piscina. Pero es la única forma de aprender a nadar. Ten en cuenta que no necesitas practicar todos los días. Una vez a la semana puede ser suficiente. Deja pasar más de una semana entre cada sesión y verás que te es más difícil avanzar.le.

    Siéntete cómodo teniendo agua en la cara

    Uno de los mayores desafíos para los adultos que están aprendiendo a nadar es mantener la cara en el agua. Puede sentirse incómodo. Incluso puede causar ansiedad leve para algunos.

    Menos el estilo espalda o dorso, los demás estilos de natación requieren que tu cabeza esté bajo el agua mucho tiempo. Acostumbrarte a la sensación de tener agua envolviendo tu cabeza es una parte importante de aprender a nadar.

    Para ello puedes hacer sumersiones en la parte poco profunda de la piscina, también puedes practicar a contener la respiración mientras tienes los ojos abiertos (las gafas pueden ayudarte para ello), también puedes usar tus brazos para moverte bajo el agua mientras aguantas la respiración. En resumen, cuanto más practiques, más cómodo te sentirás.

    Aprende la mecánica del estilo crol o libre

    El mejor estilo para comenzar a nadar es el estilo crol o libre. Los nadadores experimentados hacen que el estilo libre se vea fácil. Pero, de hecho, debes dominar bien la técnica para realizar un movimiento suave y eficiente a través del agua.

    Cuando aprendas a nadar como adulto, no pienses en el estilo libre como un solo movimiento. En cambio, piensa en ello como una serie de movimientos, en los que cada uno necesita atención. Concéntrate en las posiciones de tus muñecas cuando tus manos entren al agua. Concéntrate en las posiciones de tus codos y antebrazos a medida que tus manos empujan el agua hacia tus caderas. Presta atención al balanceo de tu cuerpo, tu patada, y cómo expulsas el aire cuando tienes la cabeza bajo el agua.

    Puedes ir a este artículo en el que te explicamos en detalle como nadar estilo crol o libre.

    Considera usar aletas

    Es útil utilizar aletas al aprender estilo libre. Te darán la propulsión hacia adelante que necesitas para aprender la mecánica individual del estilo crol o libre.

    Apúntate a clases de natación para adultos

    Si estás interesado en aprender a nadar siendo adulto, te recomendamos que tomes lecciones de alguien con experiencia. De esa manera, aprenderá la técnica de forma adecuada desde el principio. Y también evitarás desarrollar malos hábitos que dificultarán tu progreso.​

    ¿Cómo flotar en el agua siendo adulto?

    Todo el mundo puede y debe aprender a flotar en el agua. Saber flotar puede salvar tu vida, y es el primer paso para aprender a nadar estilo crol o libre. Puede parecer imposible en el principio, pero lo primero que debes hacer es creer que puedes flotar.

    Según la física, cualquier cosa con más densidad que el agua se hundirá en ella. El cuerpo humano es menos denso que el agua, así que mantenerte a flote no debería suponer mucho esfuerzo.

    La cantidad de músculos que tiene una persona afecta a la capacidad de mantenerse a flote. Cuanta mayor densidad muscular, más fácil es hundirte en el agua. Es por esto que los hombres suelen tener más dificultades para mantenerse a flote, ya que normalmente tienen más densidad muscular que las mujeres. Evita hundirte en el agua

    La capacidad pulmonar también afecta en tu facilidad para evitar hundirte en el agua. Cuanto más aire puedas almacenar en tus pulmones, más fácil será para ti flotar en el agua.

    Una vez sabes cuales son las características de tu cuerpo que influyen en la flotación, te compartiremos algunas claves para aprender a mantenerte a flote en el agua.

    Relajación

    La clave para flotar es un gran desafío para los principiantes, ya que hay que relajarse. Tan pronto como domines esto, podrás "nadar".

    Practica en zonas poco profundas hasta que tengas confianza en tu capacidad natural para flotar, y también para acostumbrarse a estar en el agua, ya que este es otro factor que puede aumentar tus temores.

    Si puedes flotar, pero todavía estás en tensión, observa tu patrón de respiración. La respiración profunda ayuda a relajarte. Y además también traerá más oxígeno a tu cuerpo, que te ayudará a flotar más.

    Mira el cielo (o el techo si estas en una piscina cubierta) y respira profundamente. Llena tus pulmones con oxígeno en cada respiración y siente como viaja el aire dentro de tus pulmones. Aguanta la respiración por un breve momento y ponte cómodo sobre el agua. Exhala y repite el proceso.

    Mejora tu técnica de flotación

    Lentamente relájate de nuevo en el agua y túmbate como si estuvieras acostado en la cama. Puedes hacer pequeños movimientos con las manos para mantener la boca y la nariz fuera del agua, y continuar respirando naturalmente.

    Si tus piernas siempre se hunden, puedes estirar tus manos por encima de la cabeza y esto creará un soporte que ayudará a elevar tus piernas en el agua.

    Fortalece tu técnica

    Utiliza tus músculos abdominales para mantenerte a flote. Haz fuerza con tu abdomen para levantar la parte inferior del cuerpo hacia la superficie.

    También puedes patear muy suavemente, lo suficiente para no tener impulso hacia adelante. Los movimientos de piernas alternados, muy ligeros y suaves, ayudarán a mantener tus piernas en la superficie. No olvides mantenerte relajado mientras haces todo esto. Los pequeños movimientos de las las manos y los pies te ayudarán a mantenerte estabilizado y cerca de la superficie del agua.

    Disfruta la ingravidez

    Una vez que te hayas relajado y estés flotando sobre tu espalda, tómate un momento para disfrutar de esta sensación. Notarás un alivio al reducir la presión de las articulaciones y los músculos. ¡Felicidades, has conseguido mantenerte a flote!

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    ¿Cómo aprender a respirar al nadar siendo adulto?

    Antes de explicarte como respirar en la natación, debes saber que mantener la cara en el agua es el primer paso. Si nadas con la cabeza levantada o la cara fuera del agua, tus piernas y caderas se hundirán en el agua. Eso ocurre porque creas más resistencia en el agua. Si te cuesta mantener la cabeza en el agua puedes comprar unas gafas de natación, o bien puedes mantener tu atención en el fondo de la piscina.

    Una vez te sientes cómodo teniendo la cabeza en al agua, debes aprender cómo y cuándo respirar en natación. Aquí debes expulsar el aire por la nariz, y inspirar por la boca. Es importante exhalar justo después de inhalar.

    No debes aguantar la respiración bajo el agua y después intentar exhalar e inhalar rápidamente cuando sales para respirar. Así lo único que conseguirás es tener una respiración pobre y superficial, y acumular mucho dióxido de carbono en tus pulmones, cansándote rápidamente.

    Hay que expulsar todo el aire mientras tu cara está sumergida en el agua. Entonces cuando te des la vuelta para respirar, tendrás tus pulmones vacíos y listos para una nueva bocanada de aire.

    Es recomendable salir a respirar cada 2, 3, 4 o 5 brazadas. Aunque lo mejor es respirar cada 3 brazadas.

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